Soy mejor de lo que creen, pero peor de lo que imaginan

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Soy mejor de lo que creen, pero peor de lo que imaginan

¿Por qué prefiere contestar por escrito las entrevistas?
Hace muchos años un poeta me aconsejó responder siempre por escrito y tenía razón, una entrevista que va a leerse merece escribirse primero.

¿Por qué llama Íntimo su gira?
Porque no viajamos con el sexteto eléctrico y porque invitamos a respetar una atmósfera íntima apagando los teléfonos celulares.

¿Desde pequeño ha nadado siempre contra la corriente?
Nunca fui un consumado nadador, pero es posible que de pequeño me haya distinguido como diferente a la mayoría.

¿Cuántos instrumentos interpreta? ¿Cuál anhela aprender a tocar?
No soy un especialista instrumental, puedo tocar el piano pero anhelo aprender a tocarlo, lo mismo con la guitarra y la batería.

¿Siendo solitario e íntimo, cómo se abrió en un libro autobiográfico como ‘Paracaídas & Vueltas’?
Porque no ventilo allí cuestiones familiares ni intimidades corrientes.

¿Sería más fácil vivir sin Internet?
Ahora pensamos que sería imposible, pero lo hemos hecho durante siglos, la vida en el siglo XX era una buena vida. Con el tiempo Internet se va a volver contra nosotros, ya lo está haciendo: va a destruir fuentes de trabajo y opciones culturales.

¿Qué más le quitaría a estos tiempos modernos?
Una cierta tendencia al puritanismo moralista que contrasta con la idea razonable de la libertad.

¿Entonces la evolución tecnológica va en detrimento de la música?
Sin duda, así lo creo. Aunque nuestra música llega a más sitios y parece más sencillo encontrar una canción, el estallido tecnológico va a terminar con la mayoría de los motivos para crear, por lo menos está desgastando un sistema que permitía creer en el éxito de un disco como oportunidad de fortuna.

Dice que su hígado es el último de una generación, ¿qué le ha cobrado su salud por los excesos del pasado?
No mucho. Tampoco se fíe de quienes no conocen los excesos porque tienen algo guardado. La salud va a cobrarles no haber vivido.

¿Cuando Cerati quedó en coma, usted replanteó cosas en su vida?
Gustavo fue un querido compañero y amigo de la música. Aún le siento presente. Por razones que no sabía explicar no le recuerdo con nostalgia.

Usted dice que no fue el peor de los rockeros de su generación. ¿Qué licencias se dio y cuáles no?
No recuerdo haberlo dicho, ahora mismo se me ocurren otros peores pero, ¡caramba! Supe llevar ciertas cosas a los extremos y no estoy arrepentido. Vivir es jugar fuerte.

Dice que usted es mejor de lo que todos creemos pero peor de lo que nos imaginamos, parafraseando a Galimberti, ¿Qué tan mejor es y qué tan peor?
“Soy mejor de lo que creen pero peor de lo que se imaginan” …. La frase es brillante y se puede aplicar a muchas cosas y en diferentes términos. Un artista válido que reclama respeto, un hombre bueno que advierte de sus aristas.

¿Qué lecciones musicales y de vida le dejó su paso por Los Abuelos de la Nada y Los Rodríguez?
Muchas, ciertamente. En Los Abuelos me hice hombre respondiendo a exigencias musicales. Los Rodríguez fue algo así como mi doctorado grabando discos y ofreciendo conciertos.

¿Cómo cree que les habría ido a discos suyos como ‘Honestidad Brutal’ y ‘Salmón’ en estos tiempos en los que la producción de un artista se despieza en canciones que se promocionan en Youtube y otras plataformas cada dos días?
Aquellos discos también “sufrían” el efecto radial; alguien elegía una canción y sonaba en la radio hasta que la gente la odiaba. Un sistema anticuado que sigue siendo efectivo, pero para mis discos no resultó siempre afortunado. Creo que parte del público rechazaba mis discos hartos de escuchar la misma canción en la radio.

¿Qué le dejó la experiencia de cantar con Los Tigres del Norte? (La Mesa del Rincón)
Grabar dos canciones en el álbum en directo fue una profunda experiencia. Me hizo más amigo de México, me consagra en el panorama popular y lo considero un privilegio personal. Tigre por un día, tigre para siempre.

¿Sigue sintiéndose vulnerable antes de una gira o concierto? ¿Ha pensado en renunciar a todo?
Estoy próximo a cumplir cuarenta años de discos y conciertos. Renunciar al trabajo no significa exactamente abandonar la música, cuando hablo de renuncia me imagino abriendo nuevos panoramas para llegar a música próxima o a una etapa distinta de la vida.

¿En estos tiempos de redes sociales y paparazzis, es complicado pasar por un ciudadano normal?
Yo soy un ciudadano normal. Las multitudes escuchan mis canciones y los más interesados en mi persona pueden venir a verme en los conciertos. Pero yo me comporto como un ciudadano perfectamente normal.

Hizo parte de la precuela de Soda Stereo, ¿Quisiera haber seguido?
Seguro. Siempre me gusta Soda Stereo y además tocaron muchos años y conquistaron el continente. Afortunadamente no tuve que elegir entre Miguel Abuelo y Soda porque aquello era apenas una semilla.

¿Quién le dio ‘Licencia para Cantar’? ¿Quién fue esa primera persona que lo apoyó musicalmente?
Mi mentor fue Beto Satragni, el primero que confió en mí para tocar en un grupo con vuelo musical propio (Raíces). Lógicamente también: Miguel Abuelo y Charly García que me impulsaron a cantar mis canciones.

Dice que ser cantante no es lo que lo define… ¿qué lo define?
Soy un músico de rock pero versátil. Escucho a los músicos y a las música con mucho respeto.

De su estancia en España proviene su amor por la tauromaquia, ¿y esa pasión por las versiones tangueras, surgió de qué episodio?
Los de Buenos Aires amamos el tango aunque no siempre lo sepamos. El tango es un caudal musical riquísimo con formas de orquestación propias y una poesía extraordinaria.

¿Tan apasionado como lo es por los toros, lo es por el fútbol?
No soy un apasionado del fútbol pero me gusta ver un buen partido … Tengo respeto y afecto por la gente del fútbol pero, para mí, no es una cuestión “religiosa”.

¿Y de dónde viene su amor por la cumbia? ¿Haría una versión de una cumbia colombiana?
La cumbia se ha convertido en una radiografía social pero bailable del pulso del pueblo de mi país. Soy respetuoso con las pasiones populares. No tengo pensado cantar una cumbia colombiana pero lo haría encantado. Siempre con alegría.

¿Qué tan amigo es de Carlos Vives?
Somos muy buenos compañeros, no tuvimos oportunidad de cosechar una amistad profunda y espero hacerlo algún día. Hace años vino a ofrecerme su respeto; son gestos que no hay que olvidar.

¿Escribe un próximo libro?
Tengo cosas escritas… De momento estoy preparando un libro de 200 fotografías de mi lente propio.

¿Por qué no le gusta andar en carro?
No sabría que hacer con un carro. Me gustan los carros antiguos pero para mirarlos.

¿Siente que nació en la época equivocada?
Me gusta la época que me tocó vivir pero, ¡caramba!, mi adolescencia coincide con una época siniestra de la Argentina, podría haberme ahorrado esos años y crecer más libre.

¿Escribir es su catarsis? ¿Si no hubiera sido cantante, hubiera sido escritor?
Nunca lo había pensado. Nunca fui suficiente lector para considerarme escritor. A veces escribir es una catarsis y otras veces es un ejercicio voluntario. Además tengo que cantar para poder cantar después.

¿Qué recuerdos le traen las canciones Estadio Azteca y Paloma?
Las canto en todos los conciertos. Son recuerdos próximos entonces.

¿Qué lo lleva a la nostalgia?
No soy excesivo cultor de la nostalgia.

¿Qué lo une a Vicentico (Los Fabulosos Cadillacs)?
¡Muchas cosas! Grabamos juntos, cantamos juntos, somos verdaderos amigos y nos entendemos muy bien. Tiene inteligencia y sentido del humor. Gabriel es mucho más de lo que parece o muestra en las entrevistas.

¿Salmón come Salmón?
¡Sí! Como salmón sin problemas. Ahora estoy implementando una dieta naturista y saludable. Hace unos meses como integral y liviano.

¿Cuál ha sido su momento de honestidad brutal?
Creo que hay que ser siempre sincero aunque a veces la honestidad frontera nos provoque algún disgusto.

¿La noche o el día?
Ahora mismo prefiero el día.

¿A quién esperaría hoy en día ‘Mil Horas’?
Mil horas son unos cuarenta y un días. Esperé más tiempo para cantar en Colombia. Mucho más tiempo.

En una canción habla de una rumba que se pegó con unas colombianas y unas empanadas… ¿Lo recuerda?
Sí, fue en un restaurante argentino en Nueva York, no consumamos la rumba con las dos hermanas pero un italiano casi me rompe la cabeza.

¿A quién le dedicó Negrita?
Son cuestiones que prefiero barrer bajo la alfombra de los olvidos.

¿Canciones como ‘Tuyo Siempre’ tienen una destinataria?
No. ‘Tuyo Siempre’ es un intento por escribir canción popular dentro de un disco venenoso y sofisticado como es El Salmón.

¿Aún cree en el amor?
Lógicamente.

¿La soledad o la compañía?
Aunque aprendí a estar solo prefiero la buena compañía.

¿Dormir o hacer el amor?
Si no es mucho pedir: Las dos cosas.

¿Qué no baila? ¿y qué sí?
Bailo mejor acostado. Soy un pésimo bailarín vertical.

¿En el amor, como en el cine, terceras partes no son buenas?
Es muy posible. Se puede argumentar una segunda oportunidad pero quizás una tercera parte ya sea mucho.

¿Cuál es la mentira más grande que se ha dicho de Calamaro?
Caramba, no lo sé …. No estoy al tanto de lo que murmuran las habladurías del mundo.

¿Con quién le gustaría hacer las paces antes de morir?
Estoy en paz con el mundo.

¿Qué piensa que pasa después de la muerte?
No me consta que haya nada más.

¿Qué piensa del concepto de Dios?
Dios como concepto es interesante pero no confío en las religiones.

¿Le teme a la muerte?
Como cualquiera. Soy partidario de programar, inclusive, el último acto.